Entrevista con José María Riaño, Secretario General de ANESDOR
El programa Formación 360 es gratuito y consiste en una promoción de la formación avanzada para motoristas.
Más de 1.500 motoristas ya han participado en los diferentes programas de formación avanzada en que ANESDOR imparte bajo el plan Vive La Moto.
“Comparto el pensamiento del director general de Tráfico, Pere Navarro, de que no debemos fomentar la formación Low cost. Tenemos que buscar una formación de calidad y con garantías. Con la seguridad no se juega”
La seguridad vial es la gran asignatura pendiente en el marco laboral.
“La formación presencial siempre tiene un plus y creo que es insustituible esa relación directa del profesor y formador con el alumno”.
ANESDOR, la Asociación Nacional de Empresas del Sector de Dos Ruedas, dentro de su programa de seguridad vial Vive La Moto, y con el apoyo de la Dirección General de Tráfico (DGT), está desarrollando desde hace unas semanas el programa Formación 360, un evento de promoción de la formación avanzada para motoristas, que tiene como objetivo mejorar la seguridad en carretera.
ANESDOR con esta actividad pretende concienciar a los conductores de la importancia de formarse para aumentar su seguridad. Los participantes en Formación 360 aprenden a identificar y corregir sus errores en la conducción, un aspecto que, junto a la importancia de mantener la moto a punto, es fundamental para mejorar en prevención.
En este sentido hay que destacar la labor de la Dirección General de Tráfico, cuyo compromiso con la seguridad y la prevención hace que las carreteras españolas sean cada vez más seguras.
«Ninguna formación inicial logra suplir la experiencia de los profesores»
Sobre esta campaña en particular y sobre el fomento de una formación presencial, interactiva y de calidad en general, hablamos con José María Riaño, secretario general de ANESDOR, que muestra “una especial preocupación por la formación vial continuada, especialmente en modo presencial e interactuando profesores y monitores con los alumnos, para intentar mitigar y corregir los riesgos que diariamente corren la peor parte dentro del colectivo vulnerable que representan los motoristas”.
“Desde ANESDOR creemos que la formación de los motoristas es desde luego un factor clave, desde el momento inicial en el que te preparas para obtener tu permiso de conducción. Pero en el mundo de las motos entendemos que necesitamos un principio de formación continua, como en otros ámbitos”, continua José María Riaño. “Porque la moto es una progresión. Normalmente empiezas con una moto pequeña en cilindrada para ir subiendo a mayores potencias. Y ninguna formación inicial logra suplir lo que es la experiencia que tienen los profesores y monitores”.
La moto es una progresión
“Si nos acordamos el primer día que nos logramos sacar el carnet de conducir, estoy convencido que ninguno éramos ni el conductor ideal ni el más seguro”, dice el secretario general de ANESDOR. “Pero después viene la experiencia y la formación continua que puedas recibir después de obtener tu carnet, y que especialmente en el mundo de la moto es altamente recomendable y apropiada, teniendo en cuenta que la tendencia natural es ir accediendo a vehículos de mayor nivel y más alta potencia”.
“La formación 360º que promovemos en ANESDOR, y que podía ser exportable a otro tipo de conductores y vehículos, la realizamos a pie de calle y carretera. Nos desplazamos a aquellos lugares donde suele haber concentración de motoristas y les ofrecemos participar de un modo totalmente gratuito a quien quiera hacerlo voluntariamente” señala Riaño.
“Les acompañamos durante un recorrido, grabando en video, que es una herramienta didáctica muy potente, y después les mostramos lo que ha ocurrido. Con la ayuda de un profesor y un monitor, ambos con amplia experiencia y formación vial, les detectan y señalan conductas o “vicios” a corregir o mejorar. Con la visualización del video muchas veces son los propios conductores los que se dan cuenta de sus propios errores antes de que se los indique el formador.”
“En paralelo también realizamos una labor de concienciación y sensibilización sobre el estado del vehículo, ya que un equipo de técnicos revisa el vehículo del alumno mientras está revisando el video. En esta revisión se analizan aquellos elementos que afectan especialmente a la seguridad (neumáticos, presión, frenos, amortiguadores, luces, etc.)” apuntan desde ANESDOR.
“Esto es un ejemplo la formación avanzada y continua que estamos promoviendo entre los conductores que ya tienen su carnet de conducir y quieren o necesitan mejorar y progresar”.
“Los conductores, según se sacan el carnet, ya creen que lo saben todo”
José María Riaño quiere “fomentar que la gente se habitúe a este tipo de cursos, porque está demostrado, lo vemos en cada curso, que los conductores según se sacan el carnet ya creen que lo saben todo y en las encuestas, después de realizar el curso, nos dicen eso: que debería haber y que les gustaría hacer más cursos de este tipo. Lo ven que es algo de alguna manera entretenido, divertido y que a la vez les aporta conocimiento y sobretodo seguridad para ellos y para el resto de usuarios”.
“La experiencia del conductor no es fácil medirla y esto puede presentar complicaciones”, continua Riaño. “Siempre ha habido la equivalencia y la posibilidad de conducir un ciclomotor con el carnet de coche y después esto se amplió para poder circular con una moto de hasta 125cc. Porque se considera que son motocicletas pequeñas de prestaciones reducidas y aparentemente no requiere de las mismas habilidades que son necesarias para llevar una moto grande”.
“Probablemente la experiencia de circular en el tráfico, en esa jungla, sea un factor muy importante a la hora de circular con este tipo de vehículos. En cualquier caso nunca está de más, no está nada mal, complementar con un curso de formación específico para ver y comprobar tus habilidades” apunta el secretario general de ANESDOR.
“Si no has montado en bici nunca o desde hace mucho tiempo, no te subas a una moto, así de primeras… Lo que debería dictar el sentido común es que, esas primeras veces, cogiésemos el vehículo en un entorno seguro acompañado de alguien muy especializado en la materia” sugiere Riaño.
“Los accidentes y víctimas mortales, desgraciadamente a la vista de las estadísticas y cifras de siniestralidad que estamos teniendo en España, se están concentrando en personas con más de diez años de carnet y cilindradas altas, en el caso de la moto en carretera”.
“En el caso del uso de la moto en ciudad, en zonas urbanas, estamos teniendo otro problema y es que en dos de cada tres accidentes con una moto implicada la responsabilidad es de un vehículo de cuatro ruedas. Pero nos es más fácil demonizar al motorista”.
“Necesitamos avanzar en esa convivencia y ser conscientes de que esto ya no es todo coches. De que cada vez hay más otro tipo de vehículos, de que hay muchas motos y que van a ir en aumento, y bicis, y bicis eléctricas, y patinetes, y patinetes eléctricos…”
“Y en esta convivencia vamos a tener que trabajar muchísimo y rápido”, subraya José María Riaño.
Concienciación y sensibilización de modo presencial
Para el secretario general de ANESDOR “la formación presencial es muy importante. Está claro que cada vez más contamos con herramientas de ayuda, a través de las aplicaciones en el móvil, con internet, y yo creo que todo eso está muy bien, para complementar los conocimientos. Pero la formación presencial siempre tiene un plus y creo que es insustituible esa relación directa del profesor y formador con el alumno”.
“Comparto el pensamiento del director general de Tráfico, Pere Navarro, de que no debemos fomentar la formación Low cost. Tenemos que buscar una formación de calidad y con garantías. Con la seguridad no se juega”, apunta.
“Esto es importante visto desde todos los ángulos”, explica José María Riaño. “Por ejemplo, a la hora de comprarte un casco para proteger tu cabeza… tu decides si vas a llevar un casco low cost o un casco que ofrezca una homologación y unos requisitos técnicos importantes. A la hora de comprar un vehículo seguro que preferimos que lleve todos los dispositivos de seguridad que se puedan incorporar a que no los lleve…»
“Y a la hora de formarme, que es mi seguridad también, prefiero una formación solvente que no una formación low cost” puntualiza Riaño.
“En este sentido en ANESDOR nos parece razonable asegurar unos mínimos de formación presencial y que estén garantizados como plantea la DGT”.
La seguridad vial es la gran asignatura pendiente en el marco laboral.
En los últimos tiempos estamos viendo un incremento del uso de la moto compartida, el motosharing, como solución a los problemas de movilidad en las ciudades. Este hecho se ha visto agravado también con los repartos conocidos como de “última milla” que se realizan con motocicletas y ciclomotores. Tanto el uso de la moto de alquiler como el de la moto propia como herramienta de trabajo hay que contemplarla como un nuevo factor de riesgo en la siniestralidad.
En ANESDOR nos indican que “los datos de accidentalidad están revelando que los comportamientos en el motosharing son notoriamente distintos del comportamiento del usuario de la moto particular. Estamos comprobando que se circula con algo menos de cuidado que cuando manejamos un vehículo propio. Hay que ser muy consciente de que sea o no sea nuestro vehículo, en términos de seguridad y responsabilidad es exactamente lo mismo para todos los usuarios y vehículos”.
“El uso de la moto en el ámbito laboral es muy intensivo y por ello hay que tomar medidas urgentes. A nadie se le ocurre hacer un trabajo de altura sin un arnés, un anclaje y un casco como mínimo”, dice José María Riaño. “Y desde esa perspectiva laboral debería tener el mismo tratamiento y la misma condición el trabajo en moto. En ese sentido, estas personas necesitan estar bien formadas y llevar un equipamiento adecuado, la empresa debe supervisar la flota, los usos correctos y el cumplimiento de toda una normativa que les proteja a ellos y al resto de usuarios.”
“La seguridad vial es la gran asignatura pendiente de la seguridad laboral, porque la mayoría de los accidentes laborales son accidentes de tráfico y parece que siempre es lo último en incorporarse al tema de la seguridad en el trabajo. Y con la proliferación del trabajo en moto lo estamos viendo claro. Hay que contemplarlo como se contempla todo el ámbito de la prevención de riesgos laborales” reivindica el secretario general de ANESDOR.
“En el caso de los trabajadores autónomos la cosa se complica y el punto de partida está bastante desierto, indica Riaño. “Hay que llegar con formación de todo tipo, rigurosa por supuesto, a estos trabajadores. Todo lo que se les facilite va a ser muy bienvenido porque parten de cero la inmensa mayoría”.
“Tenemos el marco de la FUNDAE para ofrecer formación a los trabajadores con cargo a la Seguridad Social, – apunta el secretario general de ANESDOR- y hay cursos de todo tipo en ese ámbito. Desde el manejo de aplicaciones informáticas hasta el de herramientas específicas, pero no encontramos nada recomendado y relacionado con la seguridad vial”.
“Y es uno de los grandes problemas, ya no solo para los propios operarios que trabajan con un vehículo como herramienta, sino que cualquiera de nosotros que vamos y venimos al trabajo estamos igualmente expuestos al riesgo de un accidente con las peores consecuencias,” concluye José María Riaño.