El sector de las autoescuelas provincial denuncia el recorte del 50% de la plantilla de la Jefatura de Tráfico de León y la pérdida del 40% de examinadores, lo que repercute en los retrasos y aumento de las listas de espera de alumnos pendientes del examen práctico para obtener el carnet de conducir.
Solo en la provincia de León las listas de espera se calcula en unos 2.000 alumnos. Esta cifra se incrementa hasta los 250.000 a nivel nacional.
La Asociación Provincial de Autoescuelas ha dado un paso al frente y ha firmado un convenio para su integración en la Federación Leonesa de Empresarios.
Se trata de la primera asociación constituida en León bajo el amparo de la democracia allá por 1977 y que en la actualidad representa al 70% del colectivo empresarial del sector en León, con cerca de una treintena de empresas asociadas que dan empleo a 150 trabajadores.
Una apuesta por el asociacionismo que, para Javier Cepedano, presidente de la Fele, supone todo un éxito. «Es un éxito importante que la asociación haga fuerza y grupo para poder reivindicar y situarse en el contenido que el corresponde. Un éxito también para la Fele ya que en un par de año hemos incorporado cinco nuevas asociaciones, hasta alcanzar las 71. Hemos dado un paso importante, dotando de fuerza y más contenido nuestra asociación».
Una nueva alianza con dos peticiones encima de la mesa para la Fele. La primera ayuda a pensar como empresas a un sector «donde jamás encontraras a un empresario al frente de una autoescuela sino a un director o a un docente», señaló Vicente González, representante de las autoescuelas.
2.000 alumnos ‘colgados’
La segunda, ser reivindicativo con el Gobierno y la Dirección General de Tráfico ante el importante recorte de personal en la Jefatura Provincial de Tráfico y las repercusiones empresariales que está teniendo en el sector autoescuelas de la provincia de León.
Un recorte que se ha traducido en la pérdida del 50% de la plantilla de la jefatura así como el 40% de los examinadores, reduciéndose a cinco profesionales, lo que ha provocado que hoy por hoy los atascos para los exámenes prácticos de conducir afecta ya a 2.000 alumnos de la provincia.
«Hay que presionar a la DGT y a la administración para que mande funcionarios porque nos estamos quedando en banco y no puede ser que un estudiante se forme durante los meses de verano y tenga que posponer su examen por falta de examinadores».
Una falta de examinadores que se agrava en los meses de verano, coincidiendo con las vacaciones. «No puede ser que todos los veranos nos dejen tirados. Los profesionales tienen derecho a sus vacaciones pero desde la administración deben cubrir esas ausencias», señaló González, que quiso destacar el esfuerzo «extraordinario» realizado desde la Jefatura Provincial de Tráfico pese a los recortes.
«Teníamos ocho examinadores en la provincia de León y ahora sólo cinco. Necesitamos que la administración se lo tome en serio este problema porque genera resulta complicados ofrecer y organizar bien nuestro trabajo. Cada vez más difícil».
Por último, Vicente González hizo alusión a la petición de la USE para la implantación de una delegación de la DGT en el Bierzo al recordar que se trata de una vieja petición que data del año 2005 con el leonés José Antonio Alonso como ministro. «Ahora vuelve a surgir esta reclamación y habrá que esperar a ver qué recorrido tiene pero no soy optimista», concluyó González.