AFASEMETRA y la división de Seguridad Vial de 3M han presentado la “Guía para conseguir una correcta Señalización de vías ciclistas». Se trata del cuarto módulo de la serie “Cuadernos de Seguridad Vial”, cuyo objetivo final es recoger y unificar criterios para dar recomendaciones prácticas acerca de la señalización de vías ciclistas, tanto en entornos urbanos como interurbanos, facilitando la labor de los responsables municipales.

La sede del Instituto de la Ingeniería de España en Madrid ha acogido la XIII Jornada sobre Señalización Vial organizada por AFASEMETRA, asociación que representa al sector de la señalización vertical, la seguridad vial y la movilidad urbana, contando con la colaboración con el Colegio de Ingenieros Técnicos de Obras Públicas e Ingenieros Civiles en la difusión de este evento, y en la que se ha presentado la “Guía para conseguir una correcta Señalización de vías ciclistas”, una publicación elaborada por los fabricantes del sector junto con uno de los principales proveedores de láminas retrorreflectantes, 3M, y que ha contado con la coordinación técnica de la consultora IPS VIAL.

La nueva guía es el cuarto módulo de los Cuadernos de Seguridad Vial, tras la publicación de la “Guía para conseguir una correcta Señalización Vertical” (2007); la “Guía para conseguir una correcta Señalización de Obras” (2016); y la “Guía para conseguir una correcta Señalización de Orientación en Entorno Urbano” (2019).

El objetivo de esta cuarta guía es recoger y unificar criterios para dar recomendaciones prácticas acerca de la señalización en vías ciclistas, tanto en entornos urbanos como interurbanos, incluyendo ejemplos concretos de situaciones en las que la señalización se configura como pieza fundamental para garantizar la seguridad de los ciclistas y usuarios en general.

Esta jornada, que ha contado con más de 160 asistentes -representantes de ayuntamientos, diputaciones, comunidades autónomas, DGT, MITMA y técnicos de otros organismos públicos y empresas del sector-, forma parte de una serie de Jornadas sobre Señalización Vial que AFASEMETRA viene celebrando desde el año 2000 en toda la geografía española.

La sesión fue inaugurada por Manuel Arbona, presidente de AFASEMETRA, quien agradeció su buena acogida por parte de los representantes públicos y socios presentes. Durante su introducción, destacó “la responsabilidad de AFASEMETRA como sector y como técnicos a la hora de homogeneizar el equipamiento y la señalización de las vías ciclistas para convertirlas en infraestructuras seguras para todos los usuarios”.

Por su parte, Mario Lombán, director de la División de Seguridad Vial de 3M Iberia, destacó que el principal objetivo de esta guía ha sido elaborar un documento que recoja y unifique las novedades que se han ido implementando por parte de las diferentes administraciones en las diferentes vías ciclistas durante los últimos años. “3M aplica la ciencia y la innovación a mejorar la vida de las personas y la división de Seguridad Vial de 3M es un ejemplo de esta misión, aportando nuestra experiencia y las últimas tecnologías para conseguir una visibilidad óptima de la señalización y colaborando en la formación de los distintos responsables de seguridad vial. La ministra de Transporte, Movilidad y Agenda Urbana anunció recientemente la inclusión de 860 millones de euros en los Presupuestos Generales del Estado de 2023 para la implantación municipal de zonas de bajas emisiones y carriles bici. En concreto, para la ejecución de 550 km de carriles bici nuevos y la renovación de otros 450 km adicionales. Esto supone una oportunidad única dada la necesidad de todas las administraciones de promover una movilidad sostenible, saludable e inclusiva”, afirmó.

Estrategias y retos de la bicicleta en el entorno urbano

Antonio Pérez Peña, de la subdirección general de Conservación de la dirección general de carreteras de Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana y coordinador de la Oficina Nacional de la Bicicleta señaló durante su intervención que cada vez más personas se desplazan en bicicleta y es imprescindible contar con infraestructuras seguras y un cambio cultural para integrarlas en la movilidad urbana. “Las ventajas son innumerables, desde la reducción de la contaminación y la reducción de la siniestralidad hasta la mejora de la salud de las personas, la promoción de un turismo sostenible, la creación de localidades más amables e inclusivas y la creación de puestos de trabajo y riqueza”, afirmó. Para conseguir estos objetivos, las estrategias del Mitma se dirigen hacia la mejora de infraestructuras; la creación de información accesible sobre las rutas ciclables; la coordinación entre administraciones, asociaciones y empresas; y las campañas de concienciación, especialmente en el ámbito escolar.

Por su parte, Marisol Santos Hernández, jefa adjunta del departamento de Planificación de la Dirección General de Planificación e Infraestructuras de la Movilidad del Ayuntamiento de Madrid, remarcó el momento clave que vivimos para abordar el reto del cambio climático y la importancia que supone en ese contexto el fomento de la micromovilidad (caminar, bicicleta, patinete y transporte público). “Nuestro objetivo es garantizar la seguridad del ciclista, pero teniendo muy en cuenta al peatón a la hora de configurar las redes y vías, fomentando el respeto y la convivencia entre las diferentes alternativas de transporte y creando itinerarios seguros”, afirmó. Asimismo, presentó diferentes iniciativas dentro de la estrategia Madrid 360, como por ejemplo BiciMAD, que cuenta actualmente con 258 estaciones y 2.964 bicicletas que se ampliarán en breve con un nuevo plan de expansión.

El desafío de una correcta señalización de las vías ciclistas

Tras la intervención de Laura Vergara, coordinadora general de ConBici -coordinadora en defensa de la bicicleta-, que aportó la experiencia de los usuarios en relación a los diferentes tipos de señalización existentes en vías ciclistas con varios ejemplos de áreas de mejora, la presentación en detalle de la nueva Guía corrió a cargo de María Luisa Jimeno, del Departamento Técnico de AFASEMETRA, que centró su intervención en el detalle de su contenido y en la explicación de la tipología de señales, la normativa vigente y los documentos de referencia tenidos en cuenta para su elaboración.

“El objetivo prioritario de la señalización es evitar accidentes”, señaló Maria Luisa. “Y para conseguirlo, los mensajes deben ser sencillos, uniformes y continuos, no pueden ser diferentes en función del lugar en que se encuentren”, añadió. Para ello, la guía recopila diferentes elementos de señalización vertical y horizontal, de segregación, sistemas dinámicos y también se centra en las características generales de los materiales a utilizar, las normas que deben cumplir y la importancia de su correcto mantenimiento.

Por su parte, Miguel López, ingeniero de aplicaciones de la división de seguridad vial de 3M, proporcionó a los asistentes una interesante visión sobre el desafío que supone una correcta señalización de las vías ciclistas, presentando además diferentes iniciativas de 3M como la formación presencial que se ofrece en la “Sala Oscura” de su Centro de Innovación en Madrid o la “e-academy”, que cuenta con varios módulos de formación de acceso gratuito en torno a diferentes temáticas relacionadas con la seguridad vial. “Llevamos 80 años desarrollando productos para la seguridad vial y nuestro objetivo es ayudar a que las familias regresen a sus casas de forma segura”, señaló.

Finalmente, Susana Amarillas, directora de Proyectos de IPS VIAL, explicó los aspectos técnicos de la nueva guía, en lo referente al diseño, composición gráfica y emplazamiento de los elementos de señalización en las vías ciclistas. “Dada la dispersión normativa que existe en la actualidad, resulta fundamental la unificación de criterios a la hora de definir la señalización de vías ciclistas en entornos urbanos e interurbanos, evitando la confusión de los usuarios e incrementando así su seguridad”, señaló. En esa línea, la guía contiene una selección y clasificación de los diferentes tipos de vías ciclistas; recomendaciones de señalización vertical-horizontal y elementos de segregación; y un detalle de los materiales más indicados para cada uso. Además, recopila los criterios de señalización según las diferentes vías ciclistas, tanto urbanas como interurbanas.

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